¿Sabías que las pieles secas tienen predisposición a arrugarse prematuramente?
Una manera de retrasar estos efectos es tener la piel nutrida e hidratada.
Los proteoglicanos nos ayudan a reparar el envejecimiento y atenúan las arrugas.
En nuestra piel tienen una función muy importante, ya que forman parte de la matriz extracelular, rellenando también los huecos que hay entre células.
Al formar parte de la sustancia fundamental, tienen una función importantísima en cuanto a la composición de la “malla” en la estructura de la piel.
Además actúan de mensajeros entre la célula y su entorno y facilitan la entrada de oxígeno y nutrientes a la célula.
El aporte externo de proteoglicanos en pieles a partir de 35-40 años (según el estado de la piel) es imprescindible a lo largo del año.
Como siempre te recomendamos que acudas a tu especialista para que te paute tu tratamiento domiciliario y de cabina según la necesidad de tu piel.